"Os gustaría elevaros hasta las nubes y las consideraríais altas; y os gustaría pasar sobre el vasto mar, y a esto le llamaríais distancia. Pero yo os digo que, cuando sembráis una semilla en la tierra, alcanzáis una altura mayor; y que cuando elogiáis la belleza de la mañana y saludáis a vuestro vecino, cruzáis un mar mayor".
G. Jalil Gibrán: El Jardín del Profeta.
Soy capaz de respirar la paz que evoca esta imagen, después de un hermoso y agotador ascenso...
ResponderEliminarPerfectamente elegida la cita, Roberto.
Un saludo
¡Qué maravilla! Ya me eché a volar, con la imaginación y con las alas que han salido al contemplar esta magnifica, y a la vez sencilla, imagen
ResponderEliminarCrucemos sin temor alguno :))
Un fuerte abrazo :))
¡Vaya pedazo de árbol! Muy acertada la elección de esas palabras. Un abrazo, Roberto.
ResponderEliminarAdoro los árboles. Sólo ver esta foto ya es un regalo.
ResponderEliminarUn abrazo.
¡Qué pasada! me temo que no tengo palabra para describir semejante maravilla de la naturaleza... aquí si es propio decir eso de "una imagen vale más que mil palabras"... y que 10.000!!! Besos, espectacular ;-).
ResponderEliminarPues si, la imagen hace que te den ganas de echarte a volar
ResponderEliminarsaludos
Hola Roberto,
ResponderEliminarMe había perdido esta entrada, discúlpame!
Con tu encuadre has conseguido magnificar la belleza y tamaño de este árbol.
Qué pequeño se ha de sentir uno bajo su sombra!
Una frase para la reflexión
Un fuerte abrazo